Este el nombre genérico que utilizamos para referirnos a una amplia variedad de narraciones breves escritas en prosa y que van desde los cuentos tradicionales y folklóricos hasta los cuentos contemporáneos, entre los que nos podemos encontrar, por ejemplo, con los microrrelatos.
Hoy en día podemos relacionar el cuento nos remite, entre otros temas, al mundo literario culto, pero los que tenéis hermanos pequeños sabéis que es algo presente en la vida -mejor dicho, en la noche- cotidiana de la infancia. Para otros, además, remite a tiempos mágicos en cuya infancia disfrutaban con la narración oral entre vecinos o familiares.
A grandes rasgos, éstas son algunas de sus características:
Hoy en día podemos relacionar el cuento nos remite, entre otros temas, al mundo literario culto, pero los que tenéis hermanos pequeños sabéis que es algo presente en la vida -mejor dicho, en la noche- cotidiana de la infancia. Para otros, además, remite a tiempos mágicos en cuya infancia disfrutaban con la narración oral entre vecinos o familiares.
A grandes rasgos, éstas son algunas de sus características:
- Sencillez y falta de detalles descriptivos en la caracterización de personajes, ambientes, etc.
- Presencia de una única acción en la que el protagonista entra en conflicto con el antagonista, debiendo superar unas pruebas u obstáculos, hasta conseguir el premio o castigo final.
- El espacio y el tiempo apenas se detallan y quedan indeterminados.
- La acción es muy rápida.
1. Un cuento medieval
2. Un cuento de Augusto Monterroso
3. El microrrelato:
El hombre invisible (José María Merino)
Aquel hombre era invisible, pero nadie se percató de ello.
La misa del perro (por Manuel Hidalgo)
Sucedió el día de Año Nuevo, muy temprano. La mujer menudita y el perro menudito entraron en el templo a escuchar la Santa Misa. La mujer tomó agua bendita de la pila, se persignó y también hizo la señal de la cruz en la frente del perrillo, que iba protegido del frío por un abrigo escocés. Se sentaron en el último banco, a mi lado. Llegado el momento de darnos la paz, la mujer me extendió una mano y el perro me dio una patita. ¿Qué iba a hacer yo? ?La paz sea contigo?, le dije al perro, que me miró con agradecimiento. Cuando llegó la hora de comulgar, la mujer me pidió que cuidara del chucho hasta su regreso, y allí nos quedamos, el perro y yo, lejos ambos del estado de gracia exigido. Que recuerde, yo nunca he mordido a nadie, pero el perro quizá tuviera ese pecadillo sin confesar. En fin, eso no era asunto mío, del mismo modo que mis asuntos no parecían ser de la incumbencia de aquel perro, el cual, al término del oficio, se mostró huidizo.
A continuación tienes el comienzo de algunos microrrelatos. Continúa uno de ellos y presenta en clase tu microrrelato:
"He decidido recuperar mi tiempo. Empezaré por los recuerdos. Soy ..." (Pablo Echart Orús)
"Salió al escenario. Yo le di paso con un susurrante soplo de mi boca..." (Mónica de Solís González)
"Al alba lo sacaron de su celda, maniatado. Los primeros rayos de sol le cegaron y ..." (Itziar Mínguez-Arnáiz)
"El emperador Li-Po tuvo un sueño. Soñó que era ..." (Norberto Luis Romero)
"Un hombre dudaba entre casarse o no con su novia de toda la vida, con la que llevaba ya seis primaveras..." (Roberto Malo)
"Despertó cansado, como todos los días. Se sentía como si un tren le hubiese pasado por encima..." (Norberto Costa)
"Tuve muchas, muchas pesadillas..." (Jesús Alonso)
"El día de mi cumpleaños, mi sobrina me regaló un bonsái y un libro de instrucciones para cuidarlo. Coloqué el bonsái en la galería..." (José María Merino)
"Lo vio pasar en un vagón de metro y supo que era el hombre de su vida..." (Beatriz Pérez-Moreno)
Éste es uno de los ingeniosos ejemplos de los alumnos:
He decidido recuperar mi tiempo. Empezaré por los recuerdos. Soy un hombre muy ocupado, todo el día de aquí para allá, de reunión en reunión. Tengo un buen trabajo y una buena memoria. Siempre me acuerdo de lo que tengo que hacer cada día, que no es cosa fácil. Lo que no recuerdo es cómo he llegado hasta esta fría y pequeña caja de madera.
2. Un cuento de Augusto Monterroso
3. El microrrelato:
El hombre invisible (José María Merino)
Aquel hombre era invisible, pero nadie se percató de ello.
La misa del perro (por Manuel Hidalgo)
Sucedió el día de Año Nuevo, muy temprano. La mujer menudita y el perro menudito entraron en el templo a escuchar la Santa Misa. La mujer tomó agua bendita de la pila, se persignó y también hizo la señal de la cruz en la frente del perrillo, que iba protegido del frío por un abrigo escocés. Se sentaron en el último banco, a mi lado. Llegado el momento de darnos la paz, la mujer me extendió una mano y el perro me dio una patita. ¿Qué iba a hacer yo? ?La paz sea contigo?, le dije al perro, que me miró con agradecimiento. Cuando llegó la hora de comulgar, la mujer me pidió que cuidara del chucho hasta su regreso, y allí nos quedamos, el perro y yo, lejos ambos del estado de gracia exigido. Que recuerde, yo nunca he mordido a nadie, pero el perro quizá tuviera ese pecadillo sin confesar. En fin, eso no era asunto mío, del mismo modo que mis asuntos no parecían ser de la incumbencia de aquel perro, el cual, al término del oficio, se mostró huidizo.
A continuación tienes el comienzo de algunos microrrelatos. Continúa uno de ellos y presenta en clase tu microrrelato:
"He decidido recuperar mi tiempo. Empezaré por los recuerdos. Soy ..." (Pablo Echart Orús)
"Salió al escenario. Yo le di paso con un susurrante soplo de mi boca..." (Mónica de Solís González)
"Al alba lo sacaron de su celda, maniatado. Los primeros rayos de sol le cegaron y ..." (Itziar Mínguez-Arnáiz)
"El emperador Li-Po tuvo un sueño. Soñó que era ..." (Norberto Luis Romero)
"Un hombre dudaba entre casarse o no con su novia de toda la vida, con la que llevaba ya seis primaveras..." (Roberto Malo)
"Despertó cansado, como todos los días. Se sentía como si un tren le hubiese pasado por encima..." (Norberto Costa)
"Tuve muchas, muchas pesadillas..." (Jesús Alonso)
"El día de mi cumpleaños, mi sobrina me regaló un bonsái y un libro de instrucciones para cuidarlo. Coloqué el bonsái en la galería..." (José María Merino)
"Lo vio pasar en un vagón de metro y supo que era el hombre de su vida..." (Beatriz Pérez-Moreno)
Éste es uno de los ingeniosos ejemplos de los alumnos:
He decidido recuperar mi tiempo. Empezaré por los recuerdos. Soy un hombre muy ocupado, todo el día de aquí para allá, de reunión en reunión. Tengo un buen trabajo y una buena memoria. Siempre me acuerdo de lo que tengo que hacer cada día, que no es cosa fácil. Lo que no recuerdo es cómo he llegado hasta esta fría y pequeña caja de madera.
(David San Baudilio Antoñanzas)
Imagen: http://static.flickr.com/3413/3255772894_a4e6f9020d_m.jpg
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